Un estudio sobre el Ejercicio como regulador del goteo de lípido en hígados normales y grasos, el primero en su área, abrió camino a nuevas investigaciones a nivel internacional.
El profesor de Educación Física y Fisiólogo del Ejercicio de Clínica MEDS, Carlos Sepúlveda, participó en una investigación llevada a cabo en el INTA donde “se ha visto que el ejercicio físico regula muchos órganos en el cuerpo, sobre todo cuando se practica durante un tiempo prolongado, siendo el músculo el principal órgano que se modifica. Pero se ha visto también que hay cambios en el sistema nervioso central, sistema endocrino e hígado”, explicó.
Lo interesante de este estudio en el que colaboró Carlos Sepúlveda, es que descubrió que “la dieta sigue siendo el elemento esencial más importante para la salud, y en estos modelos controlados de investigación en animales, observamos dos variables, dieta y ejercicio (…) Lo vemos con una dieta alta en grasa, obeso génica, extremadamente dañina para el cuerpo donde el ejercicio no es capaz de generar un cambio por sí solo. Uno tiende a pensar que el ejercicio es medicina, pero sin dieta el ejercicio tiene un efecto mínimo sobre las variables fisiológicas del cuerpo”, precisó el también Magister en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte.
Carlos Sepúlveda, participó, además, de una segunda investigación, que fue sobre si los ejercicios de alta intensidad en intervalos de tiempo pueden ser beneficiosos para la salud en los colegios. Para esto, revisaron diferentes papers que mostraron protocolos de investigación, basados en Hit y que son aplicados en estudiantes.
A juicio del integrante del Laboratorio de Ciencias del Ejercicio de Clínica MEDS, “se revisaron varios estudios que demostraban cambios y mejoras en distintos ámbitos de la salud en los jóvenes, pero en el caso del peso corporal solo un estudio comprobó que sí lo podía modificar” , puntualizó.
Sepúlveda recalcó lo interesante que fue participar en ambas investigaciones, sobre todo en la del Ejercicio como regulador del goteo de lípido en hígados normales y grasos, toda vez que se desarrolló una nueva línea de estudio, que antes no había sido explorada. “Todos los trabajos en animales son el puente para llevarlo posteriormente al contexto práctico. Esta es la primera aproximación, pronto vendrán los ensayos clínicos”, agregó.
El profesional de MEDS trabaja en el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos, INTA, con el cual MEDS cuenta con un convenio marco. “Esto es muy importante para la investigación cruzada. Cuando en INTA se hacen pruebas en humanos, tienen la opción de hacerlo en MEDS y cuando nosotros tenemos pensado hacer pruebas con humanos y necesitamos análisis de biología molecular, lo hacemos con ellos. Es un gran beneficio para ambos”, explicó Sepúlveda.
El profesional de MEDS se encuentra realizando su último año de doctorado de Nutrición en la Universidad de Chile.